Buenas tardes y bienvenidos todos al Tercer encuentro de Escuelas Javerianas: Juntos construimos la Catedral.
Entre los profesionales que necesitan mayor visión de futuro, está la función de profesor-educador. La educación es el mayor reto que tiene la sociedad y de ella depende que haya personas comprometidas por el bien común.
Hoy nos reunimos en esta casa de Santa María de Galapagar, para compartir nuestras búsquedas, quehaceres y logros para alcanzar tres elementos irrenunciables en nuestra tarea: la excelencia, la ética y el compromiso. Estoy segura que todos queremos ser líderes, innovadores, ilusionados por aprender, con capacidad de presente y queriendo alcanzar nuestro sueño de futuro, de excelencia y compromiso para nuestros jóvenes.
Es importante y justo reconocer que nuestros alumnos cuando se van, se llevan en su mochila un bagaje de buena formación técnica, social y valores cristianos (sus cartas y palabras de agradecimiento nos llegan muy a lo hondo), podemos estar contentos por estos logros, pero una vez más tenemos que preguntarnos: ¿dónde estamos? ¿A dónde queremos ir? ¿Cuál es el perfil del alumno que queremos conseguir para este mundo en continuo cambio? ¿Con que habilidades y herramientas contamos para hacerlo?
Estos interrogantes nos llevan a ver la necesidad de trasformar el leguaje y cambiar nuestras rutinas pedagógicas, y cada vez más nos decimos qué podemos hacer mirando al futuro?, futuro que no se conoce, pero que percibimos, por el entorno cambiante que nos rodea con todas las innovaciones tecnológicas que se están produciendo, que será muy distinto. Y nos seguimos preguntando, cómo dar respuesta siendo un profesional innovador? Cómo tengo que rediseñar mi presencia en el aula…
Vamos caminando hacia el profesor orientador de experiencia, más que trasmisor de contenidos, hacia el profesor motivador en el “laboratorio de aprendizaje interrelacionado”; pero, no nos engañemos la innovación tiene que estar dotada de sentido profundo: del por qué y para qué de cada tarea o descubrimiento, si no trasmitimos sentido, estaremos haciendo profesionales pero con carencia de compromiso social y para eso ya están otros.
Se necesitan profesores soñadores, que quieran cambiar el mundo… y entre todos nosotros ya existen…cerrar los ojos… ¿no los veis…? algo nuevo está brotando como dice Isaías 43,19. Estoy convencida que en nuestros centros hay muchos soñadores… y que aquí en este encuentro van, vamos a poner en común sueños, y realidades, logros, y fracasos...es en definitiva, lo que somos y hacemos…ese es el conjunto de Escuelas Javerianas.
Un conjunto de personas que tienen la misma misión, los mismos valores que el Padre Manuel Marín Triana, puso en el corazón de cada javeriana.
Estamos celebrando los 75 años de la magnífica intuición e innovación del P. Marín al fundar la I. Javeriana, que en su momento rompió moldes, creó un estilo nuevo de religiosas…con más libertad para actuar evangelizando sin molde prefijados…y esa es la impronta que se ve en las javerianas, que se percibe en nuestros centros que son un tanto distintos de otros, con un aire de sencillez y naturalidad, de cercanía, de evangelizar sin imponer, de alegría, una preocupación por la formación integral, con preferencia por las personas con más necesidades.(Ahí tenemos el milagro de Javerianas: traigo aquí a mi hija/o porque me han dicho que aquí los sacan adelante…). Efectivamente los “sacamos adelante” y los formamos buenos profesionales y buenas personas…ese es nuestro reto y compromiso.
Todos teníamos ilusión por encontrarnos otra vez y aquí estamos para comunicar, celebrar, reír, innovar, compartir… bueno no perdamos más tiempo. Comienza el encuentro:
Innovación Escuelas Javerianas
Construyendo la Catedral III
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