viernes, 21 de octubre de 2016

El liderazgo en las Javerianas



              Juntos construimos la Catedral

LAS VIRTUDES DEL JEFE: EL LIDERAZGO EN LAS JAVERIANAS

Líder es todo aquel que acepta la responsabilidad de conducir a otros. En la vida práctica, todos nos vemos en circunstancias en las que tenemos que “dirigir”, a otros, aunque sea en asuntos muy sencillos.
                                                                                                                    
El paso capital que ha de dar el dirigente, el líder,  es   aceptar  la RESPONSABILIDAD , que lleva consigo el mando.

La responsabilidad, nace de la confianza que se nos confiere, sea por una persona o por un grupo, por una institución  o por toda la sociedad, y la tenemos que aceptar desde el momento en que aceptamos una autoridad.  Esa responsabilidad, no se extiende sólo a los propios actos, sino también a los actos de las personas que están en el equipo.

Cuando se tiene esa responsabilidad, no se debe olvidar nunca:
·       Que es un error grave exigir a una persona más de lo puede dar.
·       Que tener una ley para los demás y otra para sí mismo, es algo que no se perdona al que tiene la misión de ser autoridad.

Toda la formación que se dé a los futuros líderes, a los alumnos, ha de ir dirigida a sacar las consecuencias de esta idea: la aceptación de la responsabilidad compromete a:

1.      Poner en tensión las  energías propias,
·        Consiste  en la capacidad de hacerse consciente de la potencia interior que “tengo como persona”. Capacidad de reconocer  “mis dones y talentos”, y ponerlos al servicio  del proyecto. “Ser lo que soy” y tener confianza en sí mismo. i

2.      Despertar el espíritu de iniciativa:
·        Otra de las grandes cualidades del líder es llegar a suscitar y a obtener el trabajo personal y entusiasta de sus colaboradores. Para eso hay que disponer abundantemente de optimismo, demostrar confianza, felicitar, alentar. . .
·        Desarrollar a las personas: saber llegar al interior de ellas. Ayudar a su crecimiento. y saber despertar los sentimientos generosos de los demás.
·       Generar influencia y proactividad:influencia  en la forma de pensar y actuar de los demás. Lo que distingue a una persona con liderazgo de la que no lo tiene, es su capacidad de confiar en las personasy que estás confíen en él. Asumir la responsabilidad y decidir en cada momento lo que se quiere hacer y cómo hacerlo, desarrollar acciones creativas y audaces para generar mejoras.
·       Saber ver a las personas mas valiosas, saber leer detrás de las apariencias
·       Establecer vínculos: dirigir, coordinar y dinamizar grupos
·       Coherencia de vida poniendo en su propia actividad, la plenitud del orden que él ha de exigir a los demás. El desorden de los actos en contradicción de los discursos, es cosa demasiado frecuente, y todo el mundo está en guardia contra ello. En esta coherencia está el ascendiente del líder.

·       La capacidad del líder de sacar el máximo potencial de las personas e implicarlas en un proyecto de forma comprometida. Conseguir que los demás se impliquen en nuestro proyecto como si fuera el suyo.
·       Trasmitir expectativas de mejora, mostrando una fe incondicional con las personas.


3.      Superar las dificultades
·       Ayuda mucho sentir el placer de hacer algo útil, la sensación de moverse en el peligro, de hacer frente a los obstáculos, a los reveses y de conseguir los éxitos.

4.       No retroceder cuando todos retroceden. ( Crisis del desengaño y el repliegue)
·       Que el valor y la entereza de ánimo no dependa del éxito de los trabajos, sino que el ánimo resuelto y optimista del líder se mantenga firme en toda coyuntura prospera o adversa.
·       Debemos encaminar nuestros pensamientos y sentimientos de modo que seamos capaces de presenciar el naufragio de nuestras ilusiones, planes y trabajos, y mantenernos en pie.
·       En la actualidad a esta actitud la denominamos en psicología positiva: RESILENCIA,y hace referencia a la condición humana que permite sobreponerse a las adversidades, construir sobre ellas y proyectarse en un futuro (  del latín “resilio” volver a tras, rebotar, aprovechas el conflicto como oportunidad de crecimiento


En la personalidad del que dirige se requiere  y hay que potenciar la práctica de:

·         la disciplina,
·        la obediencia,
·        la obra terminada,
·       dominio de sí mismo,
·       la rectitud de intención,
·       la generosidad
·       control de la imaginación, de la palabra y de
 los nervios

Todo eso va preparando para conseguir:

  1.  JUICIO CERTERO.

·       Asertivo: el líder es  claro, directo y equilibrado y no se anda con rodeos. Comunica las ideas y sentimientos sin herir o perjudicar y actuando desde un estado interior de autoconfianza. Logra  que lo que trasmite tenga fuerza y persuada. Dice lo que tiene que decir porque no tiene miedos interiores. Se hace respetar cuando alguien quiere manipularle.

  1. EQUILIBRIO

·       Es poner orden en las ideas,  concepciones y juicios. Es necesario hacer la síntesis de muchas cosas pequeñas, no hay que perderse en los detalles que llevan a no atender a la visión de conjunto.

·       El dominio de si mismo. Equilibrio nervioso, dominio de los impulsos. Esta posesión no es obra de un día, sino el fruto de una larga paciencia y de un continuo control de si mismo antes de cualquier acción importante y del examen después de ella. Alcanzar una personalidad firme, amplia, comprensiva y eficiente
         
·        Ante las tormentas que descargan otros, la única actitud fecunda y sabia es la calma propia.
   

  1.  DECISIONES ENÉRGICAS

·        Huir de todo lo instintivo y de decisiones precipitadas, nos da  fuerza y seguridad.

·       Se necesitan personas que dediquen tiempo a su formación y a la mejora de sus capacidades para percibir, identificar y analizar la realidad, los patrones de comportamiento social, cultural, las necesidades y preocupaciones de cada tiempo.

·       Conseguir un pensamiento sistémico que es una actitud para ver y afrontar la realidad con el zoom que muestra el detalle y permite ver las cosas en distintos planos y afrontarlas de modo global. (Obama: los problemas puntuales requieren respuestas globales).

·       Alcanzar la difícil armonía de la firmeza y la flexibilidad, no confundiendo la firmeza con la rigidez ni la flexibilidad con la debilidad


  1.  TRABAJO EFICAZ.

·       El líder tiene que ser eficiente que significa obtener por el trabajo un resultado positivo y completo, en el tiempo debido. Es más eficiente la persona que en el menor tiempo obtiene un resultado mayor y más perfecto. “Más vale pájaro en mano…” obtener un resultado concreto aunque no sea el perfectísimo… Se puede ser muy inteligente y emplear una hora en hacer un trabajo de diez minutos.
·       Esta formación es personal y es cuestión de organización y método.

Cuatro son las principales tareas de las que depende un buen gobierno:


  1. PREVENIR:
·        Es la virtud del líder que le hace estar constantemente inclinado hacia el futuro, viendo venir, antes de que lleguen, los sucesos y las dificultades.
·        El líder debe proyectar hacia el porvenirsus aspiraciones, para ir situando los objetivos de su marcha.
·       Quien  no sabe preocuparse de lo que va a venir, para construir su plan, para modificar una actitud, evitar un peligro, asegurar posiciones de repliegue o nuevos elementos que le son necesarios, se convertiría en un dependiente, inerte, indeciso, rutinario, que debe ceder su sitio a otro…


  1. ORGANIZAR:
·         Poner las personas y las cosas en orden para conseguir un fin permanente, distribuir los trabajos y las funciones en el mando, medir y regular la duración de los trabajos y hacer que cada servicio esté dotado de los medios necesarios para la acción. Obteniendo la sinergia en el grupo (que consiste en generar mayor valor trabajando en conjunto, que aquel que podrían producir trabajando en forma separada.)

·       Ha de guardarse de ser un improvisador. La improvisación consiste en la línea del menor esfuerzo. Está en no prepararse para la acción, para hablar, para tener los datos necesarios, para resolver. Así se acaba por ser un mediocre.

·       Priorizar lo importante: no se puede llegar a todo, y hay que preguntar de todo lo que hago qué es realmente importante para mi tarea.

o    Hay que jerarquizar lo importante frente a lo urgente:
a.     Importante y urgente
b.     Importante y no urgente
c.     Urgente y no importante
d.     No urgente  ni importante


  1. MANDAR o DIRIGIR:

·        Es poner en ejercicio la autoridad para mover a la acción a los miembros del equipo. Los buenos líderes son eficaces porque crean resonancia, es decir, están sintonizados con el equipo y colaboran de forma interdependiente en una dirección que es compartida.


·       Es persuadir y comunicar:  las personas necesitan saber  cual es su sitio en una organización y conocer el pasado, el presente y el futuro de esa organización. Trasmitir la identidad, los objetivos esenciales y operativos, los roles y las responsabilidades que les pedimos.

·       Empatía y escucha: es capaz de escuchar para que los demás se expresen, participando afectivamente en la realidad de la otra persona.

·       El líder no debe ser ambicioso del mando, ni rígido o intransigente en ordenar.

·       Pero tampoco tímido ni débil de modo que no se atreva a mandar, y con energía si es preciso. El líder no ordena por el gusto de mandar, sino porque es responsable y antepone a todo el bien de la organización.


·       Delegar en dos direcciones:
                                                    i.     Tareas esenciales porque  se confía en las personas y se quiere trasmitir el conocimiento de las cosas sin temer que ese conocimiento disminuya su autoridad.
                                                   ii.     Tareas rutinarias, que  impiden la dedicación a otros asuntos que requieren más atención:

·       De estos dos extremos se debe huir en el mando:
         
·       La intransigencia, la tendencia a romper con los miembros del equipo, cuando éstos no siguen las órdenes que se les dan; y de otra parte
·       La indefinida tolerancia e inacciónante las repetidas faltas de disciplina y de obediencia.

a.     “Suaviter et fortiter”, suavemente en la forma y fuertemente en el fondo, es el secreto del buen gobierno y del saber mandar en un jefe. Las órdenes, no por ser dadas suavemente, pueden dejar de cumplirse.


  1. CONTROLAR o COMPROBAR:

·        Es la cualidad que más falta generalmente a los dirigentes: es el examen sobre los resultados del esfuerzo propio y del de aquellos que tienen que cumplir las  órdenes.

·        No dejar las disposiciones dadas hasta que conste su cumplimiento y buen resultado; la verificación de los documentos…Todo eso es a veces árido, duro y desagradable, pero absolutamente  necesario para asegurar los resultados.

·       Nunca será buen líder quien se quede tranquilo después de haber dado una orden: de tres veces, dos, o se hará al revés, o se hará a destiempo o se hará sin resultado y habrá que insistir de nuevo. Y de todo esto es el jefe el responsable.

                   
Por último para ser un buen líder y  conseguir todo esto, lo primero que  debe de  hacer es respetar y querer sinceramente, a sus compañeros, a sus colaboradores, a sus alumnos, quererlos a fondo y de veras, de modo que esté dispuesto a hacer por ellos cualquier sacrificio.
Lo segundo, es estar convencido de que una misión preciosa se nos ha confiado, no es solo nuestra, el Espíritu mueve hacia ella a muchas personas creyentes y no creyentes, para que juntos ayudemos a los jóvenes a ver que entre todos tenemos que construir un mundo más justo, mas solidario, mas acogedor, más bello. Un mundo en donde todos quepamos.

                                                                                       Ros. M. Cardo
                                                                                        Galapagar Junio 2011

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